Una quinta rueda es un componente esencial ubicado en la parte posterior de un camión remolcador, justo encima del eje trasero.
Se compone de una placa circular montada horizontalmente y orientada hacia la parte trasera del camión. Esta placa cuenta con un pivote central y se conecta al remolque a través de un dispositivo conocido como «acoplador» o «enganche de quinta rueda». El acoplador se asegura mediante un mecanismo de bloqueo, como un pasador o una cerradura, garantizando una conexión segura entre el camión y el remolque.
La función principal de la quinta rueda es facilitar el enganche entre el camión remolcador y el remolque. Actúa como un enlace seguro y flexible entre ambos vehículos, permitiendo la transferencia de peso del remolque al camión. Además, contribuye a la maniobrabilidad y control del conjunto durante la conducción.
Funciones de la quinta rueda:
Distribución del peso:
Distribuye el peso del remolque al eje trasero del camión, lo que contribuye a la estabilidad y el equilibrio del vehículo durante la marcha.
Maniobrabilidad:
Permite que el remolque gire y se mueva de manera flexible alrededor del punto de pivote. Esto facilita las maniobras en espacios reducidos y mejora la seguridad durante el transporte al mantener una conexión sólida entre ambos vehículos.
Seguridad:
La quinta rueda asegura una unión firme y confiable entre el camión y el remolque, asegurando que ambos vehículos permanezcan acoplados de manera segura durante el transporte. Esto minimiza la posibilidad de desenganche o movimientos peligrosos, mejorando la seguridad en la carretera.
Capacidad de carga:
La quinta rueda también tiene una capacidad de carga específica y está diseñada para soportar cargas pesadas (como contenedores, cisternas…), lo que permite transportar remolques con grandes cargas de manera segura y eficiente.